Dolor abdominal funcional tipo cólico: síntomas, causas y tratamiento

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  • Dolor abdominal

Todos hemos pasado por algo similar: el sol brilla, los pájaros cantan, usted está tomando un paseo y escuchando su canción favorita a través de sus audífonos, cuando de repente se paraliza. Se le hace un nudo en el abdomen. Quiere derrumbarse. El dolor es tan persistente y profundo que en ese instante se cuestiona el sentido mismo de la vida. Tiene cólicos abdominales. A pesar del horrible dolor, hay ocasiones en las que estos cólicos debilitantes no se deben a una enfermedad real1. En estos casos, los cólicos se agrupan bajo la expresión “dolor abdominal funcional tipo cólico” (FACP, por sus siglas en inglés). Pero ¿cuáles son las causas y los síntomas de esta afección, y qué puede hacer al respecto?

En este artículo, esclarecemos este complicado tema, porque al comprender cuáles son los factores que causan los cólicos abdominales, resulta mucho más fácil tratarlos.

¿Qué es el FACP?

Una reciente revisión, publicada en la prestigiosa revista Journal of Clinical Gastroenterology , define el FACP como un dolor tipo cólico recurrente de leve a moderado que aparece de forma repentina y dura segundos, minutos o unas horas.1

El FACP es muy frecuente, hasta un 39 % de los participantes estadounidenses de un estudio informaron la presencia de este síntoma.3 Afortunadamente, no suele ser grave. No obstante, la causa no es exactamente clara y es posible que, al realizar pruebas, estas no indiquen ningún problema.

Síntomas del FACP

El FACP puede aparecer solo o junto con otros síntomas como:2

  • Diarrea
  • Estreñimiento

  • Distensión abdominal

El FACP suele ser desagradable o doloroso, pero no lo suficiente como para impedirle realizar sus actividades cotidianas, como ir a la escuela o al trabajo.1

Por último, si también siente la necesidad de defecar cuando tiene cólicos abdominales, debe consultar con su médico. En estos casos, es más probable que la causa sea el síndrome del intestino irritable (SII).

Causas y desencadenantes del FACP

Los investigadores no están totalmente seguros de cuál es la causa del FACP. Sin embargo, están de acuerdo en que es probable que existan múltiples causas y que estas sean similares a las que provocan el SII.

Concretamente, la combinación de los factores enumerados a continuación pueden causar el FACP:

  • Inflamación intestinal de bajo grado (una reacción exagerada del sistema inmunitario);

  • Hipersensibilidad al dolor alrededor de los órganos internos;

  • Problemas con los músculos del tracto gastrointestinal;

  • Un desequilibrio entre las bacterias “buenas” y “malas” del intestino.

Entre los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer FACP se incluyen los siguientes:

  • Genes;

  • Factores desencadenantes, como

Estar nervioso puede:1

  • Hacer que su estómago vacíe la comida más lentamente;
  • Hacer que el contenido de su intestino grueso pase más deprisa, lo que le hace defecar más rápido;

  • Hacer que sea más sensible al dolor en la pared intestinal.

Lea nuestro artículo aquí para obtener más información sobre el eje intestino-cerebro y lo que puede hacer para “equilibrarlo”.

Alimentos desencadenantes

Ciertos alimentos o patrones alimentarios (por ejemplo, comer a horas irregulares o realizar un número irregular de comidas al día) pueden desencadenar su FACP. Puede ser útil llevar un diario para identificar qué alimentos y comportamientos alimentarios desencadenan sus cólicos abdominales.2

Aunque los investigadores no están seguros de los factores desencadenantes del FACP, podemos tomar como guía lo que sabemos sobre el SII y otros problemas gastrointestinales similares.

Muchas personas con SII identifican que los siguientes comportamientos desencadenan sus crisis:2

  • Comer a horas irregulares;
  • Seguir una dieta poco variada y que no contenga la cantidad suficiente de cada grupo principal de alimentos;

  • Comer fibra insoluble, alimentos grasos o alimentos que provocan gases;

  • Tomar cafeína;

  • Comer alimentos ricos en los llamados FODMAP (oligo, di y monosacáridos fermentables y polialcoholes).

Tratamientos para el FACP

Si solo padece FACP ocasionalmente y el dolor es leve, intente evitar los alimentos, las bebidas y las situaciones y emociones que desencadenan sus síntomas.1

Si su dolor empeora cuando se pone nervioso, pruebe técnicas de relajación. Acuda siempre a un médico si le preocupan sus síntomas: puede hacerle algunas pruebas y confirmar que su afección no sea grave.

También puede beneficiarse de medicamentos de venta libre como los antiespasmódicos. Estos fármacos son los más eficaces para aliviar el FACP porque atacan el dolor en su raíz: en el músculo liso del intestino. Los antiespasmódicos detienen los retorcijones y las contracciones musculares de la pared intestinal.

Antiespasmódicos: Buscapina®

Existen varios tipos de tratamientos antiespasmódicos de venta libre (OTC, por sus siglas en inglés). Entre ellos se incluyen:

  • Butilbromuro de hioscina (Buscapina®);
  • Aceite de menta (Buscamint®).

La Buscapina® ha sido un aliado de confianza en la lucha contra los cólicos y retorcijones abdominales durante 70 años. Los fabricantes de Buscapina® saben que, para algunas personas, los dolores abdominales no ceden sin un poco de ayuda de un analgésico adicional: el paracetamol (acetaminofén). Por ello, la Buscapina® está disponible en dos versiones:

  • Buscapina® : butilbromuro de hioscina
  • Buscapina® Compositum NF: una potente combinación de butilbromuro de hioscina y paracetamol (acetaminofén) para quienes sufren dolores y cólicos abdominales* más fuertes.

Es importante tener en cuenta que los analgésicos o calmantes no son igualmente adecuados para tratar el FACP.

Los analgésicos bloquean la percepción del dolor y las señales de dolor del sistema nervioso central. Por su parte, los antiespasmódicos como la Buscapina® actúan directamente sobre la causa del dolor y solo cuando es necesario, relajando los músculos espasmódicos del intestino.

La Buscapina® es efectiva contra el dolor actuando localmente en el intestino.

¿Cuándo comunicarse con un médico?

Comuníquese con un médico si presenta alguno de los siguientes síntomas además de sus dolores abdominales:

  • Ha perdido peso sin desearlo.

  • Presenta palidez.

  • Se siente indispuesto.

  • Tiene vómitos o diarrea persistentes.

  • Tiene sangre en las heces.

También debe acudir al médico en los siguientes casos:

  • Sus cólicos abdominales aparecen cuando está menstruando o cuando realiza alguna actividad física.

  • El dolor le impide hacer las cosas que le gustan o que se le exigen (como ir a trabajar o hacer ejercicio).

  • Nunca antes había experimentado un dolor tan intenso.

Por último, si su dolor tiende a mejorar después de defecar, hable con un médico o farmacéutico.

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